Cuando fui al mercado y vi caballas grandes, cada una pesaba entre 500 y 600 gr y cuando eso ocurre no se puede dejar de comprar, máxime cuando su brillo debido a su frescor casi te hace daño a los ojos. Entonces empiezas a pensar la mejor de manera de servirlas sin maltratarlas.
Particularmente pienso que la mejor manera es aquella en la que las trabajas lo menos posible pero aprovechando todo el frescor y sabor, por eso pienso que marinadas es la forma perfecta.
Ingredientes:
3 caballas grandes (1,500 gr.), 1 vaso de mirin, 1/4 vaso de vinagre de arroz, 1 taza de café de jugo de maracuyá, el zumo y ralladura de una lima y sal.
Elaboración:
Sacar los lomos a las caballas y quitar las espinas.
En un recipiente adecuado, poner una capa de sal en el fondo, colocar los lomos encima y cubrirlos con otra capa de sal. Dejar 45 minutos, luego sacar con cuidado, lavar los lomos y reservar.
Mientras, preparar la marinada mezclando el mirin, el vinagre de arroz, el zumo y la ralladura de la lima, ligar bien y a continuación añadir el jugo de maracuyá.
En una bolsa de congelación grande, meter los lomos de caballa y a continuación la marinada, sellar bien y guardar en la nevera durante otro 45 minutos.
Sacar los lomos de la bolsa y retirar la piel fina de los lomos. Cortar en trozo de bocado e ir emplatando.
Por último, salsear con una cucharada de marinada y servir sólo o acompañado con alguna guarnición, en este caso opté por unos bastoncitos de zanahoria cocidos al dente.
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